La Salud de la madre y la del Padre influyen en la evolución del embarazo

Durante mucho tiempo hemos estado preocupados por la salud de la madre y cómo afecta a la salud del hijo. Las madres diabéticas tienen más riesgo de malformaciones fetales, las mujeres con hipertensión tienen más riesgo de desarrollar fetos con retraso del crecimiento, y muchas más patologías a las cuales vigilamos de cerca para que el embarazo transcurra de forma feliz y sin contratiempos.

Pero ¿qué influencia recibe del padre? Sabemos que la mitad de los genes del futuro hijo proceden del padre, por tanto, la salud del hijo se ve afectada por la salud del padre.

El Padre pone algo más que su semilla con sus genes

La salud de ambos, tanto de la madre como del padre son claves para que se produzca un embarazo y en segundo lugar que ese embarazo llegue a término sin complicaciones. El padre participa más de lo que hasta ahora habíamos creído. Y la salud del padre podría ser crucial para el desarrollo del futuro bebé. No solo se heredan los genes. Esos genes se encuentran en un medio que les rodea y que puede modificarse en función de los hábitos de las personas.

¿CÓMO AFECTA LA SALUD DEL PADRE AL DESARROLLO DEL EMBARAZO?

Hay situaciones muy evidentes que han dado pistas sobre la acción de la salud del padre sobre el desarrollo del embarazo. Una de estas situaciones la encontramos en los padres adictos al tabaco. Las madres dejan de fumar, pero los padres siguen fumando, convirtiendo a sus hijos en fumadores pasivos.

Hay muchos más ejemplos, pero que no son el objetivo de esta publicación. Pero nos referimos más bien a la ausencia de enfermedades de los padres, pues la adicción se considera una enfermedad, pero hay muchas otras enfermedades que pueden afectar al embarazo.

¿CUÁLES SON LAS CONSECUENCIAS DE UNA SALUD DEFICIENTE DEL PADRE?

En un estudio recientemente publicado en “Healthy Reporter” el 10 de Marzo de 2020, nos ponen sobre aviso que la deficiente salud del padre se asocia con un aumento del riesgo de bajo peso del feto al nacer, mayor riesgo de parto pretérmino y mayor tiempo de estancia hospitalaria del recién nacido. Pero también mayor riesgo en las mujeres gestantes.

Este estudio valoró 786.000 recién nacidos y analizó la salud del padre, llegando a la conclusión de que se debe tener presente la salud del padre antes de la concepción.

Y esto es importante, pues valoramos la salud de la mujer, haciéndole una revisión, pero no se valora la salud del hombre, tal vez porque no habíamos pensado que podría ser responsable de complicaciones del embarazo o bien porque no tenemos una pauta a seguir en la valoración de la salud del padre.

¿QUÉ PATOLOGÍAS SE DEBERÍAN TENER PRESENTES EN LA SALUD DE LOS PADRES?

No está claro que patologías deberíamos analizar en el padre, pero si que parece claro que hay más riesgo de parto pretérmino, bajo peso al nacer y mayor tiempo de estancia hospitalaria en el recién nacido, de aquellos neonatos que son hijos de padres que tienen hipertensión, obesidad, depresión, diabetes o cáncer.

¿CÓMO AFECTA LA SALUD DEL PADRE A LA MUJER EMBARAZADA?

En el novedoso estudio publicado, la deficiente salud del padre afectó negativamente a la mujer embarazada, aumentando el riesgo de diabetes del embarazo o de preeclampsia, una enfermedad hipertensiva que se da durante el embarazo y que pone en riesgo tanto la vida de la madre como del feto.

¿CÓMO SE EXPLICA LA IMPORTANCIA DE LA SALUD DEL PADRE SOBRE EL DESARROLLO DEL EMBARAZO?

Ya conocíamos que la calidad del esperma del hombre se veía influenciada por su salud y por los agentes ambientales que le podían afectar (humo, sustancias alimenticias, productos nutricionales, etc).

La hipótesis que se plantea para responder a la salud del hombre como responsable del aumento de riesgo del embarazo son los cambios moleculares que pueden ocurrir en los genes. Sabemos que el padre contribuye al desarrollo del feto con la mitad de los genes. Y que estos genes se encuentran rodeados en un medio que estudia una rama de la genética conocida como epigenética. Este medio puede variar y hacer que el gen se exprese de una manera o de otra, con lo que el futuro bebe puede tener una predisposición o no tenerla. Un padre diabético mal controlado, puede tener un ambiente tóxico por el exceso de azúcar. Y este exceso de azúcar puede provocar cambios epigenéticos que lleven a provocar pequeños cambios en determinados genes que no son tan graves para provocar un aborto, pero lo suficientemente severos para provocar alteraciones en el feto, recién nacido o en el niño cuando sea adulto.

Pero los genes paternos no solo participan del desarrollo del embrión, sino también participan del desarrollo de la placenta y por tanto pueden causar alteraciones placentarias.

Pero no debemos olvidar que algunas alteraciones de la salud de los padres se asocian a alteraciones de la mujer también. Como dicen los expertos, es más probable que un hombre obeso se junte con una mujer obesa, por lo que las alteraciones de la obesidad, estarán presentes tanto en el padre como en la madre, como la diabetes, la hipertensión, etc.

Por tanto y desde nuestra modesta opinión pensamos igual que los autores de dicho trabajo, la consulta preconcepcional, en la que la mujer solicita una revisión para quedarse embarazada, debe extenderse a su pareja con el fin de corregir malos hábitos y subsanar patologías mal controladas.

Esta información está basada en la publicación: Could dad-to-be’s health affect his newborn’s health? (2020, March 10) retrieved 11 March 2020 from https://medicalxpress.com/news/2020-03-dad-to-be-health-affect-newborn.html

AGRADECIMIENTO

Agradecemos a los autores del artículo el esfuerzo que realizan para que todos estemos informados y podamos mejorar el futuro de nuestros hijos.