Maternidad, cuidados

CONTACTO PRECOZ PIEL CON PIEL

Las primeras horas tras el nacimiento son un momento crítico en la adaptación del recién nacido. Durante este periodo la madre puede estar excesivamente cansada por lo que es necesario que el acompañante vigile atentamente el bienestar tanto de la madre como del bebé, prestando especial atención a que esta adaptación se realiza sin dificultad.

Siempre que la situación lo permita, se realizará de forma inmediata contacto piel con piel del recién nacido con su madre. Este proceso natural favorece su adaptación, el establecimiento del vínculo madre-hijo y el inicio de la lactancia materna, por tanto, es muy importante no interrumpirlo salvo que sea estrictamente necesario.

Durante este proceso, la vigilancia es sencilla, únicamente deberá controlar que:

• Los labios estén sonrosados. Debe avisar a los profesionales sanitarios si nota los labios azulados o pálidos.
• Respira sin dificultad. Debe avisar si le cuesta respirar o se queja.
• Tiene fuerza. Debe avisar si lo nota blandito (como un muñeco de trapo) o tembloroso.

Tras un periodo de descanso el bebé nacido comenzará a poner en marcha sus reflejos y madre e hijo empezarán a interactuar instintivamente.

PREVENCIÓN DE LA ENFERMEDAD HEMORRÁGICA

Tras el parto se administra al recién nacido una dosis de vitamina K con el objetivo de prevenir la enfermedad hemorrágica.

PREVENCIÓN DE LA CONJUNTIVITIS

El bebé, especialmente el que nace por vía vaginal, entra en contacto con bacterias de la madre que en ocasiones pueden dar lugar a una conjuntivitis. Para prevenirla se administrará al recién nacido una pomada de antibiótico en los ojos en las primeras horas tras el parto.

CRIBADOS NEONATALES

• Cribado metabólico (“prueba del talón”). Permite identificar diversas enfermedades metabólicas en niños aparentemente sanos mediante una pequeña muestra de sangre obtenida entre las 24 y 72 horas de vida.  Actualmente en la Comunidad Valenciana son 7 las enfermedades incluidas.
• Cribado auditivo (otoemisiones) para la detección precoz de sordera. Esta prueba nos informa si el sonido que se emite llega al cerebro del recién nacido. Hay circunstancias en las que el resultado de la prueba puede salir alterado sin que el niño este sordo, como, por ejemplo, cuando todavía queda algo de líquido amniótico en el oído o simplemente existe ruido ambiental. Por tanto, en ocasiones puede ser necesario repetir la prueba. Si aún así el resultado está alterado (o en circunstancias especiales como primera opción) se realizarán potenciales evocados auditivos.
• Cribado de defectos cardíacos congénitos críticos, mediante la determinación no invasiva de la saturación de oxígeno de la sangre (pulsioximetría).